Mientras que Leo
canaliza la energía
hacia la conquista
de la individualidad
y toma de conciencia
del ego, en el
signo de Virgo
la energía se
canaliza hacia
la racionalidad,
la lógica y el
análisis de las
propias capacidades
intelectuales.
Del mismo modo
que en este período
se realiza la
separación de
la mies de la
madre Tierra y
la consiguiente
selección para
la recolección,
en la psique de
quien nace bajo
el signo de Virgo
existe la tendencia
a dividir, clasificar,
analizar y eliminar
lo superfluo.
Mercurio, planeta
regente, es aquí
muy distinto del
Mercurio-Aire
de los Géminis.
En el elemento
Tierra de Virgo
pierde la movilidad
y la improvisación
y convierte la
personalidad en
moderación y autocontrol.
Temperamento nervioso
en el que la vida
psiquica y mental
pasa por delante
de las manifestaciones
físicas; naturaleza
refinada, de reacciones
flexibles, de
conducta selectiva,
con algunas dificultades
de adaptación
y de integración
al medio ambiente,
con una inquietud
latente. En el
rechazo del instinto
se encuentra la
base de su personalidad:
el ser
pasa todo por
la criba, reflexiona
antes de actuar,
a veces incluso
"busca cuatro
pies al gato".
Gracias a este
freno, introduce
en su vida una
disciplina y edifica
un orden que satisface
un ideal. De ahí
un lado perfeccionista,
un deseo de cultura
o de perfección
moral que satisface
una necesidad
de autodeterminación,
de seguridad en
sí mismo.
Ante la angustia
por lo desconocido,
prefiere apoyarse
en la sensatez
de su juicio,
situando su salud
a un nivel de
reflexión, un
cálculo razonado,
un acto perfeccionado.
Práctico, realista,
busca la seguridad,
la quietud, vive
en defensa contra
el Instinto, a
través de mecanismos
de protección,
bajo forma de
retracción del
Yo (introversión,
reserva, pudor,
timidez, sobriedad,
sentimiento de
inferioridad,
desapego...).
Tendencia general
a retener, a controlar,
a disciplinarse,
a dominarse; economía,
parsimonia, acumulación,
conservación;
contemporización,
creación laboriosa
y escrupulosa,
manía del detalle,
apego a los principios,
a las reglas y
consignas; honestidad,
conciencia, la
aplicación, respetabilidad,
pureza, perfección;
análisis, duda,
escepticismo,
lucidez, organización,
método, clasificación,
sistemátización,
gusto enciclopédico;
espíritu dirigido
hacia las cosas
difíciles, laboriosas,
ingratas o penosas.
Las facultades
mentales se imponen
sobre las instintivas.
La predisposición
a la inquietud
origina un sistema
nervioso muy sensible;
con estados de
ánimo alternos
y cambiantes.
La duplicidad
del signo hace,
por una parte,
el carácter pesimista,
inclinado a la
melancolía y a
menudo con ideas
destructivas,
aunque por otra
puede conferir
una fuerte inclinación
creativa dirigida
a la búsqueda
de la perfección
e incluso del
refinamiento.
Negando instinto,
la personalidad
intenta controlar,
ordenar su flujo
vital. Siempre
está presente
la preocupación
por mejorar y
mejorarse con
una atenta búsqueda
del detalle y
de lo particular.
La inteligencia
es analítica,
práctica y crítica,
con fuerte sentido
de la organización
y de pasión por
la técnica.
Desea sistematizar
casi burocratizar,
cada sector de
su propia existencia.
Si prevalece el
rechazo de 1o
instintivo el
carácter puede
llegar a hacerse
algo árido, frío
y exageradamente
atento a la minucia,
puntilloso y obsesionado
por el orden.
El individuo puede
estar muy afectado
por el moralismo
y conservadurismo,
porque da mucha
importancia al
presente y no
le gusta cambiar
sino después de
un atento y controlado
examen de la situación:
todo debe ser
conducido por
la razón y lógica,
nada debe ser
abandonado a la
casualidad ni
a la pasión. Virgo
corresponde a
la sexta casa
del Zodíaco, que
representa lo
cotidiano, las
cosas pequeñas,
la atención al
propio cuerpo.
De hecho, los
nacidos bajo este
signo es a menudo
obsesionados por
la higiene y aseo
personales y por
la salud.
La predisposición
a concentrarse
en el orden y
el método hace
de Virgo un signo
muy capacitado
para la teoría
que para las grandes
estrategias. Son
trabajadores muy
serios y concienzudos,
incansables y
con gran sentido
del deber. Su
capacidad manual
es a menudo excepcional.
Grandes actitudes
para llegar a
ser muy buenos
técnicos, y, aunque
ejerzan cualquier
tipo profesión,
serán capaces
de efectuar las
reparaciones caseras.
El exilio de Júpiter
(planeta del optimismo)
conforma un sujeto
desconfiado, cauteloso
y privado entusiasmo
y extraversión.
Se encuentra tentado
a apostar su vida
en un juego inferior
a él; cuenta con
menos fracasos
que los demás
tipos, pero también
con más resultados
mediocres. Virgo
es una herramienta,
una capacidad
de dominio que
puede ponerse
al servicio de
una gran pasión.
Pero él solo en
la acción tiende
a contentarse
con poco, con
algún éxito modesto,
a falta de saber
situarse en primera
fila, contentándose
con una vida ya
arada o que lleva
a una vía cerrada,
al margen de la
gran vida. Por
ello este tipo
se encuentra a
menudo en una
situación por
debajo de su valor
real. Lo que cuenta
para él es la
necesidad de ser
útil, el gusto
por servir, la
pasión del trabajo,
la entrega a su
oficio.
Tanto el hombre
como la mujer
afectivamente
más bien fríos,
a veces hasta
puritanos, y difícilmente
se abandonan a
la pasión. Son
exigentes con
su pareja y, si
no encuentran
la adecuada, prefieren
quedarse solos.
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